Transportistas escolares solicitan una ayuda económica para subsistir en la cuarentena

Uno de los sectores más golpeados por la cuarentena es el de los transportistas escolares. De lo que va del año no han podido desarrollar su actividad de manera normal y por este motivo sus ingresos han sido nulos. Sumado el receso escolar de vacaciones de verano, esta actividad lleva más de cuatro meses sin trabajo. Por delante, además, el panorama es desalentador, ya que el retorno a clases tampoco está definido y sea uno de los últimos en reincorporase.

La Unión de Transportes Escolares hizo llegar la preocupación que tienen a diferentes organismos del Gobierno provincial, pero hasta ahora no hay tenido respuestas. “No pedimos que nos den un subsidio, lo que solicitamos es un préstamo para poder vivir y pagarlo una vez que las clase comiencen y nos podamos reincorporar”, destacó el secretario de la organización, Jorge Barroso en diálogo con El Chorrillero.

Con esa idea, los transportistas se acercaron al Concejo Deliberante de San Luis y transmitieron la idea que consiste en un “crédito” mensual que les permita salir del crítico escenario financiero que transitan.

Fue así que concejales del bloque San Luis Unido acompañaron la solicitud, y escuchando las iniciativas de los trabajadores dieron forma a un proyecto de ordenanza (que ya fue presentado) para que la Municipalidad de San Luis cree un programa de ayuda económica para los transportistas escolares habilitados de la ciudad.

En detalle, se trata de otorgar un aporte extraordinario mensual de $12.000 por el tiempo que dure la suspensión de la actividad escolar en el ámbito de la ciudad de San Luis. La norma fija que tal ayuda, una vez reanudada la actividad escolar, deberá ser devuelta durante 36 meses, con un plazo de gracia de tres meses contados a partir del mes siguiente al que se reanude la actividad escolar. Además, el aporte económico no podrá superar el plazo de seis meses.

Se especifica que podrán acceder al beneficio establecido, quienes cumplan con las siguientes condiciones: tener domicilio en la ciudad de San Luis y licencia habilitada por la Municipalidad como transportista escolar. Se calcula que son alrededor de 35 los están autorizados para ofrecer el servicio escolar en la capital puntana.

“Nuestro sector está seriamente perjudicado al punto que hay algunas personas que han puesto en ventas sus vehículos, otro se han dedicado a otra cosa”, destacó Barroso a la hora de hacer un análisis.

Por su parte, Pedro Alcaraz, otro transportista hizo hincapié en la necesidad que la gestión de Sergio Tamayo les garantice “una prórroga para pagar las patentes”.

“La Municipalidad te exige que cambies el vehículo. Pero por ejemplo, a mí se me venció el modelo y tuve que solicitar un crédito para poder trabajar, y ahora con todo esto solo tengo deudas”, describió.

También planteó su “indignación” hacia el Gobierno provincial: “Piensan que la educación solo abarca a los profesores y alumnos; somos muchos los que trabajamos en el sistema educativo y se han olvidado de nosotros”.

El marco nacional

A raíz de esta situación los transportistas del país están unidos en el mismo reclamo. Y es en este sentido, que el sector se contactó con la diputada Roxana Nahir Reyes (de la provincia de Santa Cruz), y fue quien realizó un proyecto que estipula tres aspectos:

– Adecuación de la tarea mientras dure la pandemia: es decir que los transportes escolares estén habilitados también para realizar tareas de delivery o en su defecto traslado de mercadería.

-La entrega de la tarjeta alimentaria para todos los transporte escolares.